Este edificio de viviendas de la fotografía, supongo de los setenta, es un ejemplo del contraste de épocas en las vistas urbanas de Madrid. En la confluencia de las calles Mejía Lequerica y Serrano Anguita, este edificio rompe la homogeneidad del paisaje de los edificios clásicos en una de las zonas más bonitas de la ciudad, dentro de los límites del Recinto Histórico. Quizá podríamos decir que es uno de esos edificios chocantes, que dañan la vista. Particularmente algunos edificios de hormigón me gustan, tienen su personalidad, y este también tiene algunos aciertos de diseño estético, pero desde luego no su ubicación. También hay otros contrastes de este tipo en las calles contiguas debidos a edificios de oficinas de esa época.
Y justo en frente, en el otro lado de la calle Mejía Lequerica se tiró el antiguo edificio existente para construir (ya en nuestro siglo XXI) otro “moderno”, bastante feo, parcialmente acristalado, de uso municipal como albergue y escuela. Estamos hablando del Recinto Histórico, donde se construirá junto al Museo de la Ciudad el novísimo mercado Barceló, ¿modernidad o impacto paisajístico?
Y justo en frente, en el otro lado de la calle Mejía Lequerica se tiró el antiguo edificio existente para construir (ya en nuestro siglo XXI) otro “moderno”, bastante feo, parcialmente acristalado, de uso municipal como albergue y escuela. Estamos hablando del Recinto Histórico, donde se construirá junto al Museo de la Ciudad el novísimo mercado Barceló, ¿modernidad o impacto paisajístico?
No hay comentarios:
Publicar un comentario